domingo, 10 de febrero de 2013

MUSEOS PÚBLICOS, MUSEOS NACIONALES




Museos públicos, museos nacionales. Arte y discursos de nación. Las épocas de las revoluciones y la democratización de la cultura: el museo como un espacio de sociabilidad y circulación cultural.

BRITISH MUSEUM, MUSEO DE LOUVRE, MUSEO NACIONAL POLACO
Los alcances y funciones de los museos en los últimos tiempos han estado sujetos a innumerables cuestionamientos. Para el presente ensayo se tomará como referencia textos de Krzysztof Pomian Museo, Nación, Museo Nacional y de Elian Hooper-Greenhill Museums and the shaping of knowledge, para a través de algunas de sus posiciones, hilar las transformaciones dentro de las organizaciones museales, su proyección y pertinencia en los tiempos actuales.
Los “museos nacionales” son depositarios de las colecciones y patrimonio representativo de un país. Sin embargo, en la práctica esa intención se cumple de muy distintas maneras. Pomian inicia su artículo contextualizando la creación de los grandes museos nacionales como el British Museum, el Louvre, los museos de historia nacional en Francia y el Museo Nacional Polaco en Suiza.

BRITISH MUSEUM
La tradición iniciada por los patricios en Venecia en el siglo XVI, de donar colecciones a la República, garantizaba a sus propietarios originarios la pervivencia de sus bienes, la continuidad del apellido, pero sobre todo significaba contribuir a la construcción del patrimonio del Estado. Italia no estaba conformada aún como país, por ello las colecciones se donaban a la ciudad, símbolo de la Patria para los venecianos. Un siglo después esta modalidad pasó las fronteras y llegó hasta Gran Bretaña. En el siglo XVII Gran Bretaña tenía particularidades geográficas muy parecidas a las de Italia, pues era una región conformada por cuatro países. Inglaterra era parte de la Gran Bretaña y los fondos que pasaron al British Museum provenían de la colección particular del inglés Sir Hans Sloane. El British Museum fue creado por el Parlamento y sería el “primer museo nacional de Europa”, considerado al mismo tiempo un bien patrimonial abierto al público para la generación de conocimiento.
Es importante precisar de qué manera influyen las particularidades geográficas e históricas de los países que conforman una gran nación como Gran Bretaña, en especial por la significación y los alcances de un museo nacional, cuando los fondos proceden exclusivamente de uno de sus países más dominantes, en este caso Inglaterra. Como refiere Pomian, ¿el British Museum es representativo de todos los países que integran la Gran Bretaña o es solamente una colección de Inglaterra para la Gran Bretaña? La pregunta surge especialmente porque la colección en sus orígenes era privada.
Por otro lado, el autor refiere las motivaciones políticas por parte del Parlamento de invertir en una institución dedicada a las artes y a la conservación de objetos raros. Era un museo nacional que mostraba valores universales, civilizatorios y elitescos, propósito suficiente para adelantar la creación del British Museum.

EL LOUVRE Y LOS MUSEOS DE HISTORIA NACIONAL EN FRANCIA
Para Pomian cualquiera de las denominaciones que pudiera haber tenido desde sus inicios el Louvre, siempre estuvieron dentro de los límites del museo nacional, con la proyección de sus colecciones similar al del British Museum, es decir, un museo depositario de la cultura universal y especialmente de la europea. Sin embargo, en este punto el autor cuestiona que quizás más representativo de la cultura francesa es el Museo de los Monumentos Franceses de Alexandre y el Museo de Antigüedades Nacionales porque sus colecciones responden a la idiosincracia y arte francés desde sus orígenes. Ello pone en cuestionamiento qué es entonces en realidad un “museo nacional”, si los edificios que conservan la historia nacional y local o los edificios que depositan la memoria universal, y por ende elevan el prestigio de la nación ante otros.
Esto lleva a tocar otros aspectos como la “presencia” de los museos nacionales pues no siempre están ubicados en las capitales, no son los más importantes o los que tienen las mejores colecciones, o los mejores presupuestos, incluso algunos funcionan en ciudades del interior o están en lugares poco visitados. Que sean nacionales no quiere decir que sean los más representantivos de un país. Asimismo, no todos los museos nacionales dependen de la nación o del Estado, sus orígenes han sido muy variables, a veces dependen de instituciones privadas.

EL MUSEO NACIONAL POLACO Y LA IDEOLOGÍA NACIONAL
Otro caso que menciona el autor es la creación del Museo Nacional Polaco en Suiza. Por estrategias políticas se crea como símbolo de unión y para mantener viva la historia del pueblo polaco. Mostraba la identidad de un país a través de sus objetos históricos y bélicos, para recordar lo que Polonia era y hacia dónde quería ir.
En general estos museos eran garantes de la ideología nacional, de la historia local, focalizaban visualmente hacía dónde apuntaba la nación y de dónde venía, su historia, sus orígenes. En medio de este panorama surge la pregunta de cuál es la naturaleza de los museos nacionales y si representan la realidad de la nación.

DOS TIPOS DE MUSEOS NACIONALES
Las experiencias de los museos mencionados y los orígenes de sus colecciones y a quiénes representan pone en evidencia dos tipos de museos nacionales: los que reúnen obras que resaltan la cultura universal y aquellos que más bien reconstruyen a través de sus colecciones las historias locales y nacionales. Ello tiene incidencia en dos visiones generales sobre la proyección de las instituciones. Según el autor esto se refleja en los museos nacionales “universales” porque construyen relatos y resaltan las semejanzas en las producciones artísticas y culturales con otras naciones; mientras que los museos nacionales “locales” evidencias las diferencias que tienen con los otros pueblos, es decir, lo que los identifica y los hace distintos y quizás únicos. Para Pomian “… El futuro de los museos nacionales dependerá de las transformaciones que afecten las maneras de estudiar, pensar y visualizar la historia, y de las formas que tome la conciencia de los diferentes pueblos…”.
Con las referencias dadas por el texto de Pomian sobre el surgimiento de los primeros museos europeos, vale la pena adentrarnos en los cambios que en los últimos años ha tenido esta institución y qué se espera de ellas. A tal fin, tomaremos como base algunos extractos del texto de Elian Hooper-Greenhill Museums and the shaping of knowledge.
El autor inicia sus comentarios aclarando que ya no son los museos nacionales como el British Museum los templos de la cultura. Los grandes edificios que albergaban las colecciones han cambiando sustancialmente y hoy incluso una casa, un barco, un castillo o una prisión pueden contener colecciones. Los cambios que se han emprendido en los últimos años en los museos, han tenido detractores especialmente por parte de aquellos que mantienen una visión conservadora heredada de esos primeros recintos. Los museos no han tenido una única manera de operar, sus funciones y objetivos se han modificado de acuerdo al contexto y a las variables políticas, sociales y económicas que inciden también en su funcionamiento y alcances. Ahora es un recinto más cercano a las instituciones educativas con un papel más activo en la generación de conocimientos y formación de los ciudadanos.
Esos roles y funciones del museo dentro de una comunidad están en el tapete de discusión. Los museos, sus colecciones, personal y edificaciones que requieren grandes inversiones han sido cuestionados por los limitados alcances de sus labores y la proyección en la sociedad. Algunos defensores colocan su valor en su rol educativo y comunitario, y como un espacio capaz de propiciar en las personas “cambios en la visión del mundo”.
La pregunta entonces es qué tipo de conocimiento se debe impartir en el museo, cuáles son sus alcances y de qué manera pueden impactar en las percepciones de sus visitantes. En este punto precisamente radican las objeciones. El autor se interroga sobre qué entendemos por conocimiento en los museos, cuál es el rol del visitante, cuál es el rol del curador, cómo se construye un relato curatorial, las relaciones entre el visitante, el espacio, el tiempo y el objeto, y finalmente qué consideramos como museo.
Los cuestionamientos han llegado hasta la organización interna, al personal que a veces es poco crítico con las funciones que desempeña en estas instituciones, a los curadores que ven sus prácticas como algo improductivo que no tiene el suficiente alcance y proyección en la sociedad. Incluso algunas instituciones trabajan sin objetivo claros. La falta de estudio sobre estos aspectos son considerados por el autor como una de las principales causas del fracaso en la definición real del problema.
Los museos crean identidades. Las decisiones relativas a cómo colocar los objetos en diálogo entre sí está determinado por el relato curatorial que se quiere mostrar, por las prácticas curatoriales específicas de cada institución, las condiciones físicas de los objetos, y los intereses, entusiasmo y experticia de los curadores. Los museos modernos son herederos del renacimiento, pero ahora tienen un doble papel, exhibir colecciones que ya han sido investigadas para hacer accesible esos conocimientos.  
Por: Anny Bello

Bibliografía
POMIAN, Krzysztof, “Musée, Nation, Musée Nacional”, en Les Débats, nº 65, París, Gallimard, mayo-agosto de 1991.
HOOPER-GREENHILL, Eilean, Museums and the Shaping of Knowledge, Londres y New York, Routledge, 1992.

domingo, 25 de noviembre de 2012

FRANZ ACKERMANN


Franz  Ackermann
Noviembre-diciembre 2012
Faena Arts Center, Sala Molinos
Aimé Paine 1169, Puerto Madero
Buenos Aires, Argentina (1137)
Teléfono: + 11 4010 9233

Durante diez días hice caminatas diarias, desde La Boca hasta Palermo, y anduve en bicicleta junto al Río de la Plata. Tomé el tren hasta el final de la estación y volví caminando hasta donde sentí que era interesante. No es que haya encontrado cosas interesantes a cada momento: sólo la vida cotidiana. Hubo aburrimiento, sol, lluvia, buenas y malas calles. A veces café muy malo; brillante la mayoría de las veces. Me gusta el anonimato. Me gusta la forma de urbanismo en la que sos sólo una parte de una situación muy compleja. Caminando en Once podés sentir diferentes capas de la economía, el tiempo, la moda, las tendencias. Observar a la gente es muy interesante.
Franz Ackermann



Al ingresar a la sala Molinos de Faena Art Center me asalta una sensación de encuentro-desencuentro: un amplio cubo blanco alberga un gran mural de Franz Ackermann. Esta propuesta que se había iniciado con la visita del artista en septiembre de este mismo año a Buenos Aires, se materializa en esta colorida puesta en sala. De un largo deambular por la ciudad, Ackermann capturó con su cámara las imágenes que aquí condensan –según su ojo- un mapeo de Buenos Aires: calles, trenes, cortes de carne, plazas, edificios, vallas, amalgamadas en una “obra única”, acoplada por varias secciones y con la intervención del collage en algunas de sus partes. Los lienzos de gran tamaño, de contrastantes colores y formas abstractas dialogan con una pequeña serie de pequeñas fotografías en blanco y negro producto de su recorrido. Vinculado a la experiencia situacionista, Akermann engrana así dos modos de ver, el registro fotográfico con una obra pictórica que por su tamaño pudiera ser vista como un gran mural, pero carente de la carga urbana (pensando en las intervenciones callejeras como el grafiti) en cuanto está circunscripto a un espacio cerrado, una sala de arte. Sin embargo, al mismo tiempo esta obra site specific, encargada y concebida especialmente para los espacios del Faena Arts Center, se acerca a la tradición de los muralistas mexicanos, que con un alto sentido del oficio, realizaron buena parte de sus obras en los interiores de edificios públicos.









Biografía
Nació en Neumarkt St. Veit, Alemania, en 1963. Estudió en la Akademie er Bildenden Kunste en Munich y en Hochschule fur Bildende Kunst en Hamburgo. En 1991, recibió la beca DAAD, que le permitió hacer su primer viaje a Asia, estableciéndose durante un año en Hong Kong. Los viajes se han transformado en la piedra fundamental de sus obras. Experimentando con prácticas inspiradas en la deriva situacionista y de psicogeografía, se vale de fotografías y bocetos que realiza a lápiz, tinta o acuarela, tomados durante sus viajes, para realizar mapas mentales. No se trata de reproducciones miméticas, sino de una síntesis entre el mundo físico y el psicológico. A partir  de éstos, compone sus instalaciones de gran escala, conglomeraciones de colores vibrantes que enfrentan al espectador con una perspectiva colapsada de espacios pictóricos, geográficos y arquitectónicos. Para Ackermann sus travesías y experiencias son parte del proceso creativo. Ha expuesto individualmente en Kunstmuseum Bonn, Irish Museum of Modern Art, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Museum of Contemporay Art de Chicago, entre otros. Sus obras se encuentran en importantes colecciones como la Daimler Contemporary de Berlín e Inhotim Centro de Arte Contemporánea, Minas Gerais.

Nota: Datos biográficos y cita textual tomados de la publicación didáctica del Faena Arts Center, editada en ocasión de la exposición. Noviembre de 2012, Buenos Aires, Argentina.

Enlaces de interés:

viernes, 23 de noviembre de 2012

Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960


Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960.
Curadores: Paulo Herkenhoff y Rodrigo Alonso.
Marzo-septiembre 2012.
Fundación Proa. Av. Pedro de Mendoza 1929 Buenos Aires, Argentina.
De martes a domingos, de las 11 a las 19 hrs. Lunes cerrado.
Teléfono: +54 11 41041000 / info@proa.org
www.proa.org

La exposición itinerará por varios museos de Brasil. Hasta finales del 2012 en el Museu Oscar Niemeyer, en febrero del 2013 en la Galleria d’Arte Moderna e Contemporanea di Bergamo (GAMeC) y finalmente en el Museu de Arte Moderna do Rio de Janeiro (MAM), bajo los auspicios de la Ley de Incentivo Cultural - Ministerio de Cultura de Brasil y la Embajada de Brasil en Argentina, y con el aporte de Tenaris Confab y Ternium - Organización Techint.


Antes que nada, debo decir que hacer una curaduría es siempre construir un discurso simbólico con signos construidos por otros, por terceros, que son los artistas.
Entonces se trata de un discurso sobre el discurso de otro.
Eso crea una doble responsabilidad: con los artistas y la sociedad.
Paulo Herkenhoff[1]

Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960, esteblece los nexos artísticos y culturales entre ambos países durante los años sesenta. Como lo señala Arnold Herkenhoff, uno de sus curadores, los antecedentes disparadores para el planteamiento del proyecto curatorial fueron dos exposiciones, una sobre la nueva figuración y otra sobre Berni, las cuales a su consideración, influyeron de manera significativa el arte brasileño de los años sesenta. Esta muestra se engrana con dos anteriores exposiciones sobre arte contemporáneo argentino, Imán: Nueva York. Arte argentino de los años 60 (2010) y Sistemas acciones y procesos 1965-1975 (2011), ambas curadas por Rodrigo Alonso. Muestras que articulan distintas aristas de una misma época, tejiendo un complejo entramado histórico y artístico. Al respecto, Adriana Rosenberg, directora de Proa, esclarece los objetivos programáticos de esta institución,

Ya desde hace dos años, Fundación Proa viene produciendo exposiciones y catálogos sobre la década del sesenta: Imán: Nueva York y SAP: Sistemas, Acciones y Procesos. Este nuevo desafío está en sintonía con nuestro programa. Fue Bruno Assami quien tomó a su cargo la dirección del proyecto y convocamos nuevamente a Rodrigo Alonso como colaborador.[2]

En este sentido se retoman algunas situaciones ya planteadas en las anteriores exposiciones que menciona Rosenberg, pero ahora puestas en diálogo con el panorama brasileño, en términos, no tanto de correspondencias, sino de visibilizar cómo los artistas sumergidos en los lenguajes de vanguardia como el pop y los nuevos realismos, captaron y readaptaron críticamente situaciones políticas complejas, signadas en ambos países por dictaduras que dieron un matiz e intención distintas al pop neoyorkino o inglés. La primera sala condensa y sumerge inmediatamente en las contradicciones históricas por medio de las imágenes. Ejemplicado claramente con el diálogo de la obra alusiva al Che Guevara, Un guerrillero no muere para que se lo cuelgue en la pared de Roberto Jacoby; la instalación de Coca-Cola de Cildo Meireles, Inserções em circuitos ideológicos; la escultura La civilización occidental y el cristiana de León Ferrari, y Lute de Carlos Zílio.

Cildo Meireles. Inserções em circuitos ideológicos, 1970

León Ferrari. La civilización occidental y el cristiana, 1965

Roberto Jacoby. Un guerrillero no muere para que
 se lo cuelgue en la pared
, 1968
La exposición reúne cincuenta y nueve artistas: Maria Louise Alemann, Claudia Andujar, Artur Barrio, Luis Fernando Benedit, Antonio Berni, Oscar Bony, Delia Cancela, Raymundo Colares, Waldemar Cordeiro, Eduardo Costa, Jorge de la Vega, Miguel de Lorenzi, Antonio Dias, León Ferrari, Nicolás García Uriburu, Anna Bella Geiger, Rubens Gerchmann, Edgardo Giménez, Carlos Gorriarena, Alberto Greco, Carmela Gross, Grupo REX, Alberto Heredia, Narcisa Hirsch, Roberto Jacoby, Kenneth Kemble, Wesley Duke Lee, Nelson Leirner, Rómulo Macció, Ivens Machado, Anna María Maiolino, Sameer Makarius, Antonio Manuel, Cildo Meireles, Walter Mejía, Pablo Menicucci, Manoel Messias, Marta Minujín, Montez Magno, Luis Felipe Noé, Hélio Oiticica, Lygia Pape, Federico Manuel Peralta Ramos, Décio Pignatari, Wanda Pimentel, Dalila Puzzovio, Glauco Rodrigues, Gilvan Samico, Rubén Santantonín, Maria do Carmo Secco, Antonio Seguí, Charlie Squirru, Pablo Suárez, Evandro Teixeira, Miguel Ángel Telechea, Claudio Tozzi, Carlos Vergara, Carlos Zilio; más de ciento cincuenta obras[3] de distinto formato y medios, así como fotografías y documentos, que dan cuenta de una corriente figurativa que emergía con fuerza y que históricamente representa fuentes de expresión llenas de fuerza y contundencia en una época marcada por importantes y desafiantes acotencimientos. 

         El abstraccionismo y el arte de sistemas fue un tipo de respuesta, la figuración fue otra. Lenguajes emergentes que arremetían contra sistemas de consumo, militancias políticas, vaivenes  económicos, cambios sociales y situaciones de género. Las palabras claves de la exposición a decir de Rosenberg son la ambigüedad y la contradicción. Mismas que se presentaron en las artes incluso bajo una muy amplia denominación de figuración, que incluía tendencias como el pop y las nuevas figuraciones caracterizados abiertamente por la reflexión crítica, especialmente a hecho políticos y económicos.


Sala 2
Marta Minujín. Revuélquese y viva, 1964
Sala 2
Luis Felipe Noé. Introducción a la esperanza, 1963
Glauco Rodríguez.  A conquista da terra, 1971

Antonio Dias. Glutão, 1965

Anna Maria Maiolino. Glu... glu...glu..., 1967






La propuesta de Herkenhoff apunta a advertir la inserción de los artistas en corrientes vanguardistas internacionales, y sus propuestas impregnadas de una carga simbólica arraigada a lo local, impulsadas por motivaciones distintas a las problemáticas norteamericanas. En este punto, el curador recupera un circuito artístico en ambos países, en un momento en “que coinciden en ser las economías más fuertes de la región y poseer un intercambio fluido con las corrientes artísticas internacionales”[4]. Además de los escenarios antiinstitucionales que cruzaron las fronteras de los museos y galerías para hacerse en y con el espacio urbano, en las calles.

Sala 3.
Obra colgada: Helio Oiticica. Bandera-poema: seja marginal, seja herói, 1968
Sala 4

Sala 4

Sala 4
Helio Oiticica. Parangolé P17 capa 13 "Estou posseudo", 1967-1986. Parangolé P21 CApa 17 "Guevaluta", 1968-1986










Así, la muestra está organizada en grupos temáticos: Mitos, enfocados en las imágenes icónicas del Che, Coca-Cola y Cristo. El lugar del sujeto, reúne obras de la nueva figuración, con las problemáticas que fueron reiteraivas a este movimiento, asociadas a las reflexiones sobre la situación del hombre en la sociedad global y de consumo. Los curadores recuperan de manera especial el desempeño de las artistas femeninas y su activo papel en el escenario cultural de entonces. Lo popular, “los artistas pop argentinos ejecutan una suerte de folklore urbano mientras, en paralelo, Berni retrata el entorno cultural de las clases humildes. En Brasil, la influencia de las favelas, las escuelas de samba o las herencias indígenas encuentran la vía en la reproducción de algunos artistas de esta época”.[5]
 Medios de comunicación, en el contexto de la Guerra Fría, las estrategias de información establecidas por los centros políticos capitalistas que tienen el control comunicacional, subvertidos a través de la contrainformación. Las masas como término y propósito de la sociedad global que tiende a borrar las identidades, llevando indiferenciaciones que avizoran la anulación del sujeto. La política retoma la Revolución Cubana como acontecimiento paradigmático y utópico, con una fuerte repercusión en el resto de los países de Latinoamérica, y que en Brasil y la Argentina es abrazada por los artistas a través de imágenes que revelan un activismo en torno a este conflicto político y las guerrillas.
 La economía es abordada como un posicionamiento crítico ante el capitalismo y la sociedad de consumo, y de la irremediable radicalización riqueza-pobreza. El panorama internacional es planteado a través de los intercambios entre ambos países, iniciándose con la Bienal de San Pablo como espacio de encuentro, los consecuentes intercambios entre el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro y la Argentina, a la figura de Romeo Brest como promotor e incentivador de acercamientos entre ambos circuitos culturales, al Instituto Di Tella, a la Galería Bonino con una de sus sedes en Río de Janerio, a las Bienales Americanas de Arte de Córdoba, entre otras. Y finalmente, la antiinstitución, como respuesta de los artistas a la necesidad salir de los espacios legitimadores de los museos y galerías, actuando con una visión interdisciplinaria, en ámbitos distintos a los tradicionales, llegando a públicos más amplios.

Bibliografía
ALONSO, Rodrigo. Imán: Nueva York. Arte argentino de los años 60. Buenos Aires, Fundación Proa, 2010
ALONSO, Rodrigo. Sistemas, acciones y procesos. 1965-1975. Buenos Aires, Fundación Proa, 2011.
GIUNTA, Andrea. Vanguardia, internacionalismo y política (Arte argentino en los años sesenta), Buenos Aires, Paidós, 2001.
HERKENHOFF, Paulo. Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960. Buenos Aires, Fundación Proa, 2012.
HERRERA, María José. “Gestión y discurso”, en AA.VV., TRAMA. Programa de cooperación y confrontación entre artistas, n° 2. Buenos Aires, Fundación Espigas, 2003.



[1] Entrevista realizada por el Blog del Guerrero, en: http://blogcentroguerrero.org/2007/03/entrevista-a-paolo-herkenhoff/. Bajado el  15 de septiembre de 2012.
[2] Prólogo del catálogo de la exposición a cargo de Adriana Rosenberg, presidenta de la Fundación Proa. Paulo Herkenhoff. Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960, Buenos Aires, Fundación Proa, 2012, p. (s/n).
[3] Mencionamos algunas de las instituciones y coleccionistas que colaboraron con el préstamo de obras:  Museu de Arte de São Paulo Asis Chateaubriand, Museu de Arte do Rio de Janeiro, Museu de Arte Moderna de São Paulo, Museu do Arte Moderna do Rio de Janeiro, Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Museo de Bellas Artes Evita- Palacio Ferreyra, Museo Nacional de Bellas Artes, Projeto Helio Oitica, entre otras. En total dieciséis instituciones culturales más coleccionistas privados y artistas en São Paulo, Rio de Janerio y Buenos Aires.
[4] Paulo Herkenhoff. Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960. Buenos Aires, Fundación Proa, 2012, p (s/n). Folleto de sala.
[5] Idem

lunes, 12 de noviembre de 2012

BOLTANSKI BUENOS AIRES / FLYING BOOKS / HOMENAJE A BORGES



Ex Biblioteca Nacional
Curadora: Diana B. Wechsler
México 564, Buenos Aires, Argentina
Del 12 de octubre al 16 de diciembre de 2012
+54 11 4362 4874

Yo que me figuraba el paraíso bajo la especie de una biblioteca
Jorge Luis Borges

            “La instalación-sitio específico se realiza en el espacio que fuera la sala central de lectura del edificio de la ex Biblioteca Nacional y que Jorge Luis Borges dirigiera entre 1955 y 1973. Se trata de un conjunto de más de 500 libros suspendidos en la sala, que “vuelan” y se mecen con una tenue brisa. Con su presencia, colores, formas, tamaños y sonido del movimiento de esas miles de hojas, restauran la vida de un espacio singular. Durante el tiempo que dure la instalación se realizarán una serie de espectáculos que integrarán libros, música y danza.”

Texto: Diana Wechsler
Curadora  






Referencias tomadas de:
Boltanski Buenos Aires. UNTREF, MUNTREF, Buenos Aires, Argentina, octubre 2012.
Publicación periódica editada en ocasión del proyecto expositivo.  

Enlaces de interés relacionados con Boltanski:
http://www.analitica.com/bitblioteca/mer/boltanski.asp

BOLTANSKI BUENOS AIRES / MIGRANTES /



Museo Hotel de Inmigrantes
Curadora: Diana B. Wechsler
Martes a domingos de 12 a 20hs.
Del 12 de octubre al 16 de diciembre de 2012
Av. Antártida Argentina 1201, (Entrada de la Escuela de Ciencias del Mar – Apostadero naval), Ciudad Autónoma de Buenos Aires
+54 – 4317.0285 / 
Entrada gratuita


Lo que trato de hacer con mi trabajo es plantear preguntas, hablar de cosas filosóficas, no por historias a través de palabras sino por historias a través de imágenes visuales. Hablo de cosas efectivamente muy simples, comunes a todos. No hablo de cosas complicadas. Lo que intento hacer es que la gente se olvide que es arte y piense que es la vida. Para dar esta impresión de vida me sirvo de medios artificiales, del arte; no es la realidad, hago un teatro; trato de que el espectador en ese momento olvide que está en un museo.
Christian Boltanski

“Boltanski construye singulares archivos-colecciones a partir de fragmentos, en esa estética austera, despojada, en esos climas entre sorpresivos y melancólicos que genera en sus modos de ocupar los espacios, es donde se revela su modo de ver, su modo de señalar un lugar en el mundo. Algo que se ve especialmente marcado en trabajos como el que aquí se presenta. Sus instalaciones ordenan fragmentos, recogen piezas aisladas para construir con ellas series de objetos que, en su conjunto, resultan poderosos disparadores de memoria, capaces de actualizar pasados y activar sentidos diversos.
            Esta intervención-instalación fue pensada por Boltanski específicamente para Buenos Aires y para este sitio, el Hotel de Inmigrantes. Tomando como punto de partida los archivos históricos que registraron cada uno de los migrantes llegados a nuestro país, albergados en este edificio, se escuchan una serie de 500 voces que, como susurros, interpelan al espectador de manera simultánea y sucesiva desde distintas fuentes. Dicen, en el idioma de origen del migrante: nombre y apellido, edad, ocupación y fecha de llegada, datos que proceden del archivo. Este murmullo, acompañado por una atmósfera tenuemente iluminada, introduce en una experiencia que conecta con la memoria y el pasado de nuestra sociedad y a la vez con el de la propia historia. Dos instalaciones luminosas con juegos de sombras y otras con fotos sobre telas, abrigos, sillas antiguas y otros materiales contribuyen a hacer presentes a aquellos que por aquí alguna vez transitaron e invitan también a pensar la cuestión de las migraciones en la actualidad.”

Texto introductorio a la muestra: Diana Wechsler
Curadora 



















Referencias tomadas de:
Boltanski Buenos Aires. UNTREF, MUNTREF, Buenos Aires, Argentina, octubre 2012.
Publicación periódica editada en ocasión del proyecto expositivo.  










Entrada destacada

PUBLICACIÓN: EL BOLÍVAR DE TORANO

EL BOLÍVAR DE TORANO. BUSTO DE SIMÓN BOLÍVAR HECHO POR PIETRO TENERANI, LOCALIZADO EN TORANO DE CARRARA, ITALIA   Autore...